Las leyes universales funcionan siempre, las conozcamos o no. Una de ellas es esta y es muy simple, y al mismo tiempo de vital importancia para nuestro futuro: toda acción que nosotros hacemos en nuestra vida trae como consecuencia el resultado equivalente para nosotros, y antes o después recibiremos lo sembrado. Es la energía de la vida, que aunque no lo veamos, todos los seres vivos somos parte de ella, por ejemplo; si siembras patatas, ¿qué crees que cosecharás? Patatas, ¿verdad? ¿Y si siembras tomates? Del mismo modo cosecharás tomates, y así con cualquier cosa que tú siembres.
Posiblemente, a lo mejor al leer esto puedes pensar: “¿y yo para qué necesito saber de agricultura? Si ni soy agricultor ni voy a sembrar nada en mi vida, ¿para qué seguir leyendo? Espero que tengas un poco más de paciencia y me dejes explicártelo más detalladamente porque es mucho más importante de lo que te imaginas. Y si lo haces, te darás cuenta de que posiblemente esta será una de las enseñanzas más importantes para tu futuro y para tu vida, pues lo mismo que pasa cuando tú siembras cualquier semilla pasa con cualquiera de tus acciones y comportamientos.
Pasa exactamente lo mismo con cada una de tus acciones, cada una de ellas lleva su energía y, antes o después, retornará a ti su fruto, y como pasa con la siembra de cualquier semilla no solo cosecharás solo lo sembrado, no, eso no sucederá, cosecharás muchísimo más de las semillas que tú sembraste. Lo mismo sucederá con tus acciones, volverán a ti en mayor cantidad y medida.
Por lo tanto, espero que reflexiones sobre esto y que te des cuenta de por qué suceden las cosas que nos suceden en nuestra vida, cada acción nuestra conlleva una reacción similar, pero en una cantidad mucho mayor.
Ahora que eres consciente de ello, ten mucho cuidado con tus acciones y comportamiento, si haces el bien a todas las personas que se crucen en tu vida, el bien volverá a ti en mayor proporción del que tú has dado. Exactamente del mismo modo, si tú haces daño a alguien, antes o después, te lo garantizo, retornará a ti en mayor medida.
Las leyes universales no fallan nunca, siempre funcionan. Si te preguntas cómo, la respuesta es que no lo sé, pero sí que sé que funcionan porque además siempre lo he comprobado en mi vida, y en la vida de muchas personas más que he observado, y he comprobado los dos casos en muchas personas, a unas les ha ido muy bien y a otras, por desgracia, muy mal, y eso ha sucedido únicamente por lo que ellos mismos sembraron con su comportamiento y sus formas hacia los demás.
Imagínate la suerte que tienes en este momento y qué afortunado eres tú, que estás leyendo esto, que seguramente desconocías y que no entendías el por qué suceden las cosas como suceden, y era simplemente porque hasta ahora no sabías cómo funcionaba ese energía de la que todos los seres vivos estamos hechos y que la ciencia ya ha demostrado que es así. A partir de ahora, tu vida puede dar un giro de 180 grados, y todas las cosas que tú hagas a partir de hoy pueden ser diferentes, cada acción (semilla) que tú siembres no será de cualquier tipo, no harás ninguna acción sin pensar antes cuál puede ser el resultado en tu vida si actúas de ese modo.
A partir de hoy, no te puedes equivocar, pues ahora sabes otro gran secreto de la vida, y además, estaba a tu disposición sin tú saberlo. Es más, lo estabas utilizando, pero a lo mejor de una forma equivocada, porque no sabías que cada acción o comportamiento en tu vida hacia los demás retornaría a ti en mayor medida. A partir de ahora no existirá la posibilidad de que puedas recibir lo que tú no quieres en tu vida, nunca más te sorprenderá lo que te pase a partir del día de hoy, porque cuidarás mucho y te pensarás siempre antes cómo vas a actuar en tu vida y cómo te comportarás con las que personas que estén a tu alrededor.
Además, como podrás ver, la forma de hacerlo es muy sencilla. Si en cada acción que tú emprendas empiezas a actuar con todo el mundo con cariño, con paciencia y con amor, y no precisamente, que también, porque sea eso lo que tú quieres cosechar y recibir en tu vida, sino sencillamente porque al hacerlo de ese modo tendrás una vida más fácil, agradable y feliz. Y tú también te mereces ser feliz, y ¿sabes cuál es la forma más sencilla para llegar a ser feliz, te la digo? ¿Estás preparado?
Si quieres ser feliz de verdad, la forma más sencilla de serlo es hacer feliz al mayor número de personas que hay en tu vida, este es el secreto y la única forma de conseguirlo.
